El oso pardo, nuestro oso
La fauna española o mejor dicho ibérica se caracteriza en comparación con la del resto de Europa y de mundo por ser de menor tamaño. El oso pardo ibérico, el lobo ibérico, las águilas son más pequeñas que sus hermanas de Europa y América.Otra de las características de España es que la fauna de mayor tamaño está muy reducida, fundamentalmente a zonas y reservas naturales.
No obstante, la industria del turismo y la caza que mueven grandes cantidades de dinero podrían empujar la balanza a una mayor extensión de espacios naturales. Un cuidado de la naturaleza que nos va a beneficiar a todos.
El efecto desbastador que producimos los hombres, está claro y un ejemplo de ello, son las abejas tanto silvestres como la melífera empleada por los apícultores de la que obtenemos miel pura. Insectos que van camino a desaparecer.
Índice del artículo:
|
También te puede interesar El lobo ibérico
1. El oso pardo ibérico
El oso pardo es el animal más grande de toda la fauna ibérica terrestre. Sin embargo, en comparación con los de su especie, es el oso más pequeño del mundo. Este animal posee un cuerpo enormemente robusto con un pelaje espeso y tupido de color pardo. Su cabeza es enorme, tiene una pequeña cola y dos pequeñas orejas redondeadas, dándole este aspecto tan tierno y adorable.
El oso pardo tiene una altura en la cruz (punto más alto de sus extremidades anteriores) de entre 90 y 100 centímetros, una longitud de unos 2 m (de cabeza a cola). Su peso rara vez superan los 180 Kg en los machos y los 150 Kg las hembras
En la cordillera cantábrica la población de osos estuvo en continuo declive en las anteriores décadas. Sin embargo, hoy en día con la mayor concienciación de la sociedad, la ayuda de organismos estatales y organizaciones y el turismo rural, la población de oso pardo se está recuperando. Actualmente se calcula que existen unos 250 ejemplares en la cordillera cantábrica.
Vídeo sobre el oso pardo
2. El oso pardo en extinción
En noviembre del 2004 murió en Canelle, en Francia, la última osa autóctona del Pirineo, quedando sólo unos pocos osos pardo machos. Com consecuencia, esta especie se da virtualmente por extinta esta especie en el Pirineo. En la actualidad, con la reintroducción de ejemplares de origen esloveno, el número de osos en el Pirineo ha ido aumentando. En la actualidad viven en torno a 35 y 40 ejemplares.
Al oso se le suele considerar como un carnívoro arrepentido, ya que su alimentación está basada fundamentalmente en la ingesta de hierbas y frutos, complementada con algo de alimentos de origen animal. Esta va desde hormigas hasta carroñas de grandes mamíferos. Además, son muy aficionados a las cerezas y a la miel.
Foto 1: Picos de Europa en Asturias
3. Hábitat del oso pardo
Las poblaciones de oso en España se encuentran concentradas en la cordillera cantábrica y en los Pirineos. Evidencias de su presencia se han encontrado en Palencia y el norte de Burgos, ya que algunos osos jóvenes vagan por zonas más alejadas, recorriendo cientos de kilómetros en búsqueda de nuevos territorios. Su visualización en el hábitat natural es muy difícil, ya que estos huyen al momento que detectan la presencia humana.
La expansión del oso en la península ibérica, es una muy buena noticia desde el punto de vista medioambiental. Dicha expansión evita la pérdida de una especie autóctona y restableciendo el equilibrio natural de nuestro hábitat y fauna autóctona. También está ayudando al desarrollo del turismo rural y a la fijación de su población.
Sin embargo, el oso al tener que convivir con el ser humano, está creando algunos quebraderos de cabeza a ganaderos y apicultores. A los ganaderos por la muerte de alguna pieza de ganado. A pesar de que son casos muy contados de ataques de oso a piezas de ganado. Asimismo, también a los apicultores por el destroza de sus colmenas, pues a los osos les encanta la miel.
Las abejas melíferas juegan un papel más importante en la conservación de los osos pardos de lo que podríamos creer. Según un estudio publicado en la revista “Environmental Management”, las abejas son fundamentales para la polinización de las flores silvestres, como: los endrinos, arándanos y castaños, y la formación de sus frutos. Estos frutos forman parte principal de la dieta de los osos pardos. Por lo tanto, la extinción o la pérdida de las abejas afecta entre otras muchas cosas a la expansión del oso pardo en la península ibérica.
4. Su afición por la miel
La afición por la miel de los osos es muy conocida.
A continuación os dejamos un vídeo dónde incluso, el oso tiene preferencias por el tipo de miel.
Vídeo 2: Oso comiendo miel por la noche
Fuentes:
La ciencia es noticia.
Fundación oso pardo. http://www.fundacionosopardo.org/
El País.
Fundación ibérica.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir